Meditación orgásmica: Lo que debe Saber
La idea de traer paz a su vida, bienestar y una conexión espiritual a través de la estimulación del clítoris puede que se le haya ocurrido a muy pocas personas, pero existe, y se llama OM o meditación orgásmica.
OneTaste es uno de los movimientos que creen en el OM como una técnica poderosa para sanar, ser más feliz y estar más en paz. De hecho, esta organización es la fusión de la conciencia con la sexualidad.
OM no está tan interesado en el final orgásmico, sino en la desconexión, la estabilidad emocional y el éxtasis que se puede experimentar a nivel espiritual a través del masaje genital femenino.
Según OneTaste OM:
Es una práctica de bienestar única que combina la atención plena con el poder de la experiencia profundamente humana y sentida del orgasmo.
Esta organización afirma que la meditación orgásmica conecta el cuerpo con la sexualidad . Entre sus cualidades está que es seguro, sistemático, porque siempre se hace de la misma manera, no tiene motivos ocultos y es íntimo. Solo ocurre entre dos personas.
El tiempo para realizar OM es de quince minutos. Durante este tiempo, un hombre, llamado acariciador, masajea el clítoris. Mientras esto ocurre, el sistema límbico se activa y el cerebro produce oxitocina.
Los Strokers no necesitan ser socios de las mujeres con las que hacen la meditación. De hecho, la experiencia de la meditación está separada del acto sexual en sí.
¿Cómo practicas la meditación orgásmica?
Las sesiones de meditación orgásmica siguen la siguiente estructura:
- Las mujeres deben desvestirse de cintura para abajo. Los acariciadores tienen puesta la ropa.
- El acariciador debe crear el nido, es decir, el espacio donde se llevará a cabo la meditación. Para ello utilizarán una esterilla de yoga y tres cojines.
- Las luces permanecen encendidas.
- El acariciador tiene un cronómetro, una toalla de mano, guantes y un lubricante a su lado.
- La mujer se coloca sobre la colchoneta y se acuesta boca arriba. Sus rodillas deberían estar dobladas.
- El acariciador está sentado sobre su lado derecho mientras usa su mano izquierda para estimularla.
- El temporizador debe configurarse en trece minutos, ya que los otros dos minutos serán para relajarse y calmarse .
- El acariciador debe indicarle a la mujer cuándo los tocará mientras se unta el dedo índice y el pulgar con lubricante.
- El masaje comienza cuando el acariciador estimula el cuadrante superior izquierdo del clítoris con el dedo índice, moviéndose hacia arriba y hacia abajo.
- Si la mujer lo desea, puede dar instrucciones al acariciador e indicar cómo quiere ser estimulada.
Cuando hayan transcurrido los trece minutos, el acariciador debe colocar su mano derecha encima de la izquierda y cubrir los genitales femeninos, presionando suavemente y manteniendo la posición durante dos minutos.
Pasado este tiempo, la mujer recuperará la compostura y ambos podrán proceder a despejar el área.
Meditación orgásmica: ¿método o culto?
Debido a los altos costos de estas sesiones, algunos críticos incluso lo han calificado de culto. Sin embargo, la práctica tiene fuertes defensores. Por ejemplo, la escritora Rose Surnow ha afirmado que la meditación orgásmica la ha llevado a un lugar placentero y pacífico. Ha cambiado por completo la forma en que experimenta el sexo.
La periodista Aurora Wells también ha comentado que, para ella, esta experiencia fue "algo extraña y clínica". Otros medios reconocidos también han recogido las opiniones de distintas mujeres que han practicado la meditación orgásmica y han referido que:
Hay un pacto extrañamente clínico ... No hay contacto visual durante la meditación orgásmica. La idea, similar al sexo budista tántrico, es extender el pico sensorial antes de alcanzar el clímax.
Sin embargo, este método difiere de otras prácticas porque, como dice el gurú Shree Ramananda :
Si bien la meditación tradicional tenía propósitos espirituales, a lo largo de los años se ha convertido en una metodología de salud o reducción de la ansiedad y en una terapia de atención plena.
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La directora ejecutiva del Instituto OM, Anjuly Ayer, también ha dicho que la meditación le resultaba extraña, "como si estuviera flotando … o mi mente se separara de mi cuerpo", pero con OM puede sentir sensaciones en cada parte de su cuerpo.
Cabe señalar que el clímax no es el objetivo del OM, por lo que la presión de tener que llegar al clímax también desaparece y ser tocada se convierte en una experiencia más placentera para las mujeres.
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